La menstruación actualmente sigue siendo un tema tabú y además es un factor más de desigualdad social y económica. Es que las personas que menstrúa debe tener una gran cantidad de dinero para comprar los productos de higiene específicos para cada ciclo. Por año, implica un gasto muy alto, que no todas las personas pueden costear. Por otro lado, muchas adolescentes tienen que faltar a la escuela por no poder acceder a esos productos. Es por eso que reclamamos que sean considerados artículos de primera necesidad, aparte realizaremos una campaña llamada Salud Menstrual para que la gente haga donaciones.