Frugazo es un bioetanol compuesto de sargazo y los 5 residuos orgánicos de las frutas más consumidas en Nuevo León, como la naranja. Con este proyecto no solo combatiremos las grandes emisiones de gases de efecto invernadero que generan los automóviles y medios de transporte terrestres, sino que, además, tomaremos ventaja del sargazo (que afecta en el turismo de las playas) y las cáscaras que forman parte de entre el 45 y 60% del peso total de las frutas, aprovechando su máximo potencial energético. Como los procesos de obtención de la gasolina contribuyen a la contaminación del medio ambiente porque es un proceso sintético que genera residuos químicos, nuestro biocombustible, al llevarse a cabo mediante el proceso metabólico natural del hongo, (la fermentación alcohólica) no generará residuos tóxicos y peligrosos que afectarán a la vida marina y terrestre. Buscamos generar un cambio e inspirar a que más personas se unan para conseguir un futuro más sostenible.