Nos enfocamos en la contaminación y buscamos una estrategia para la sustitución de almácigos plásticos y fue así que desarrollamos una fórmula la cual nos permitió crear macetas o almácigos con materiales de desechos orgánicos y biodegradables, mismos que proporcionan nutrientes para un crecimiento más favorable para la panta. Además que al ser biodegradable se descompondrá completamente en la tierra con ayuda de microorganismos sin dejar ningún rastro de sustancias dañinas para el medio ambiente. Este proyecto se apega a la agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible en los objetivos 12, 13 y 15 por lo que con nuestro proyecto, buscamos mejorar con pequeñas acciones el entorno en que vivimos disminuyendo el plástico que se produce, asimismo buscamos beneficiar a la sociedad que se dedique al cultivo. Al implementar el uso de este producto en viveros.